Ser padre o madre implica una responsabilidad que a veces exige lo mejor de nosotros mismos y hacer cosas que nunca pensamos que podíamos realizar. El instinto de protección hacia los hijos consigue que, en situaciones extremas, aumenten los reflejos o la velocidad de manera inusitada. ¿No te lo crees? Pues estos ejemplos te van a hacer cambiar de opinión, sin duda.
Este padre tiene unos reflejos dignos de un portero de fútbol
También hay que estar muy pendiente de las mascotas
Realmente impresionante
A veces se necesita ayuda externa
Justo a tiempo
Los padres y madres del reino animal también necesitan estar atentos todo el tiempo para que sus pequeños no se metan en líos
Esto podía haber acabado mucho peor
¿Cómo lo ha hecho?
No ha llegado a tocar el suelo
Se mascaba la tragedia
Hay que dormir con un ojo abierto
Menos mal…
Sin palabras
Y tú, ¿alguna vez has necesitado «superpoderes» para salvar a tus hijos del peligro?
Fuente: Miraquevideo